Definición de Mandala


Mándala es un término de origen sánscrito, que significa diagramas o representaciones simbólicas bastante complejas, utilizadas tanto en el budismo como en el hinduismo.
Los mandalas tradicionales, los grandes mandalas de la tradición hindú, suelen ser imágenes enormemente complejas, que incluyen letras sánscritas y deidades que se quieran asimilar.
En sánscrito quiere decir CIRCULO SAGRADO (algunos le llaman el laberinto de los círculos) Esta palabra es también conocida como rueda o totalidad.
Más allá de su definició como palabra, desde el punto de vista espiritual es un centro energético de equilibrio y purificación que ayuda a transformar el entorno y la mente. También se le define como un sistema ideográfico contenedor de un espacio sagrado.

La estructura de un mandala está basada en tres principios ordenados que la disponen:
______1. El punto central
______2. La irradiación desde el centro
______3. La delimitación externa del circulo

El punto central es el misterioso núcleo espiritual energético, el ámbito en que nace toda existencia en espacio y en tiempo. La irradiación procedente del centro, tiende hacia fuera hasta el contorno limítrofe. La circunferencia, enlazando lo interno con lo externo fluctúa, por último, desde la periferia volviendo al núcleo más intimo.
Todo mandala está concentrado en el núcleo, del que todo movimiento parte y al que todo conduce. El centro aparece como principio y fin de todos los caminos posibles. Un antiguo proverbio dice “si quieres comprender el punto, explora el circulo”.
Volviendo a la estructura, el espacio sagrado (el centro del universo y soporte de concentración), es generalmente representado como un círculo inscrito dentro de una forma cuadrangular. Algunos mandalas son lineales mientras que otros son figurativos, otros parecen laberintos auténticos. Si bien el denominador común es el círculo (uno o varios) que rodea un núcleo interno, puede también ir acompañado de otras figuras geométricas como el cuadrado o el triángulo. El anillo externo del mandala consiste en una barrera de fuego, que por una parte prohibe el acceso a los no iniciados, pero por otra, simboliza el conocimiento metafísico que quema la ignorancia.